* Venían de jugar y en una tienda tomaron cerveza; dos patrullas se acercaron cuando se despedían, intentaron detenerlos, pero vecinos y familiares lo evitaron; denuncian a jefa de zona por amenazas “si levantábamos algún acta”
CHIMALHUACÁN, Méx. Policías locales mataron a balazos a un perro y dispararon contra civiles dejando dos heridos, al pretender detener a jóvenes que regresaban de jugar fútbol en el barrio San Pablo y que se habían detenido a tomar unas cervezas en una tienda, y antes de retirarse la comandanta de zona los amenazó “si levantaban algún acta”.
Los denunciantes, vecinos y testigos de los hechos, explicaron que alrededor de las 21:00 horas de ayer jueves, un grupo de jóvenes que regresaban de jugar fútbol, se encontraban despidiéndose en la esquina de las calles Vasco de Quiroga y Unión del barrio San Pablo, cuando llegaron dos patrullas y los policías municipales intentaron detenerlos por la falta administrativa.
La detención provocó el reclamo de vecinos a los uniformados de las unidades 895 y 558, quienes desenfundaron sus armas y las accionaron contra los habitantes, hiriendo a Francisco Fortino Peralta Valverde, de 28 años de edad y a Juan Carlos Valverde Buendía, de 26 años.
Francisco Fortino recibió un balazo en el brazo derecho, en tanto que Juan Carlos recibió tres, en una pierna uno, y en la espalda y la mano los dos restantes
Al ver que intentaban llevarse a los jóvenes, vecinos y familiares salieron a defenderlos, por lo que los policías municipales sacaron sus armas y “comenzaron a disparar contra la gente”. Y a los que los graban agrediendo a los jóvenes, también les dispararon.
“Cuando ya no tenían balas, sacaron botellas de cerveza de la patrulla y comenzaron a aventarlas contra los vecinos”, dijo una testiga de los hechos.
Los lesionados tuvieron que ser trasladados por sus propios medios al Hospital General Gustavo Baz, de Nezahualcóyotl, porque aunque solicitaron el apoyo de los servicios de emergencia, “como dependen del municipio, estos no llegaron”.
Todavía cuando ya se retiraban, los policías municipales de Chimalhuacán, volvieron a cargar sus armas y le dispararon al perrito french poodle, llamado Roñas, que cayó abatido bajo las balas de los uniformados, “como si fuera un criminal”, dijo el dueño de la mascota.
Los vecinos tomaron fotografías de los casquillos de las balas de alto calibre con las que les dispararon, así como de un balazo que se alojó en la cortina de un negocio.
Por los hechos, familiares de los lesionados cerraron las calles, mientras otro grupo se dirigió al Centro de Justicia de Chimalhuacán, para iniciar la averiguación previa correspondiente.
Señalaron que la comandante a cargo de la zona, que iba en la patrulla 558, antes de retirarse los amenazó, señalándoles que “sí levantábamos algún acta, iba a ir sobre nuestra familia, al fin que ya nos tenía ubicados a todos”, dijo una de las afectadas.
Otro familiar de los agredidos, señaló que esta es la muestra de la inseguridad en la que viven en este municipio, “no es cierto que Chimalhuacán sea seguro como dice la presidenta municipal Rosalba Pineda, porque es la policía la que agrede y amenaza a la gente para que no denuncien”.
Hasta hoy por la tarde, la alcaldía no había emitido su postura al respecto.
Con información de Reforma, Reporteros en Movimiento
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