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            Por Carlos Monroy Hermosillo / Columnista invitado

Foto de Carlos Monroy Hermosillo.

 DECLINACIÓN Y ALIANZA

• Morena-PT juntos rumbo al 2018• Tiempos de política, tiempos de definiciones


Sábado 27 de mayo de 2017

Toluca, estado de México, mayo de 2017. Año del cambio de régimen.- La determinación del Partido del Trabajo (PT), y de Óscar González Yáñez, de declinar su candidatura por la gubernatura del estado de México, en favor de Morena y Delfina Gómez, sabiendo que de entre los contendientes es el de mayor trayectoria, conocimiento y experiencia, no solo es histórica, como el propio Óscar la califica, es una decisión patriota de mucho coraje y valor, que sin duda redundará en beneficio de millones de mexiquenses abandonados a su suerte durante 88 años por el mal gobierno priísta, que tendrá que pagar por su actuar corrupto e impune, que en todo tiempo y a toda hora, sólo vieron en la utilización de los recursos públicos oportunidades de negocio y enriquecimiento ilícito al amparo del poder.

Felicidades al PT, pero sobre todo a Óscar, reciban un fuerte y solidario abrazo. ¡Todos echados pa' delante!, porque sí es posible contar una nueva historia.

AMLO celebra esta decisión dado que fortalece la probabilidad de que la profesora Delfina Gómez sea la próxima gobernadora del estado de México. Pero aun así y en su soberbia, no deja de ser un malagradecido, exhibiendo la psicología de su pasado priista, autoritario y de control absoluto sobre sus correligionarios a quienes impone disciplina y sumisión en torno a su poder centralizador, y como ahora, no tengo duda, pretenderá hacerlo con los aliancistas.

Ni un gesto de agradecimiento, humildad y reconocimiento hacia Óscar González Yáñez, quien coherentemente sacrificó la única y real candidatura de izquierda en esta contienda en beneficio de la población del estado de México. Solo referencias convenencieras y generales hacia el PT. Ningún reconocimiento abierto a la labor petista en la entidad en su apoyo durante los últimos años.

En todo caso, bien sabe AMLO, desde un inicio, que la mejor candidatura de las “izquierdas” para disputarle al PRI el poder en la entidad, era la de Óscar González. Hoy el PRI estaría perdido.

Y en la más nefasta hipocresía, AMLO espera la definición de Movimiento Ciudadano, cuando sabe que sus dirigentes, nacional (Dante Delgado), y estatal, han sido calificados de traidores por sus bases por no presentar candidatura alguna, en su deleznable entrega al PRI. Y ni qué decir de la dirigencia del PRD, más cercana al PAN y PRI que a la gente, y tan solo en la disputa, entre sus tribus, del cascarón que les queda.


Bien por su declaración en el sentido de que “son momentos de definiciones, no de medias tintas, pues el país requiere de un cambio y una transformación. Son dos caminos, dos opciones, dos alternativas: o se apoya a la mafia en el poder o un cambio verdadero con el pueblo”. Morena -PT juntos rumbo al 2018 por la presidencia de la República. “La Patria es primero; a ganarle al PRI en su madriguera”.



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