* Ofrece conferencia “El mariachi, mi madre y otras
especies protegidas” en el Centro Comunitario Ecatepec Casa de Morelos
* Multipremiado, en octubre recibirá el galardón de la
Federación de Gremios de Editores de España con el “Premio Liber 2019”
Juan Villoro durante su conferencia este sábado en la Casa de Morelos, en San Cristóbal Ecatepec. CARLOS GARCÍA-MERLO. |
Jorge Villa | Ecatepec, Méx., domingo 4 de agosto de
2019
En el segundo tiempo del encuentro, el autor de “Dios es redondo”
empezó a frotar con discreción unas llaves, entre sus manos, porque tiene la
superstición de que abren cerraduras de la imaginación: es Juan Villoro,
escritor y periodista mexicano que participó en la Jornada por la Paz de este
sábado en el Centro Comunitario Ecatepec Casa de Morelos.
En su conferencia “El mariachi, mi madre y otras especies
protegidas”, Juan Villoro no sólo dedicó espacio a la lectura de sus textos o al recuerdo de sus personajes o a la tecnología que nos ha sobrepasado, también respondió a preguntas de sus
lectoras, lectores, y anticipó el creador de “Balón dividido” que también
obsequiaría libros, los que además autografió.
Unas llaves, entre sus manos, son frotadas porque tiene la superstición de que abren las cerraduras de la imaginación. CARLOS GARCÍA-MERLO. |
Agradeció la invitación de “estar en este jardín, y celebro
la iniciativa de buscar la paz y también de tener una justa indignación y de
decir ‘estamos hasta la madre’.
“Y a través de la cultura, la cultura contribuye a crear
tejido social y a transmitir valores: creo que es mucho más difícil que alguien
se corrompa si tiene una cultura sólida, creo que es mucho más difícil que
alguien cometa un crimen. O también si es un lector, o alguien que puede disfrutar
del arte”, sostuvo.
Qué va a pasar con la cultura
También dio respuesta Juan Villoro a una inquietud convertida en pregunta respecto de qué va a pasar con la cultura en este gobierno:
"Estamos en una situación peligrosa de polarizar las opiniones demasiado y decir que todo está bien o que todo está mal, y la gente ve todo en blanco o en negro, yo creo que hay cosas que están bien y otras que están mal. Yo celebro que haya un presidente honesto que no robe.
CARLOS GARCÍA-MERLO. |
También dio respuesta Juan Villoro a una inquietud convertida en pregunta respecto de qué va a pasar con la cultura en este gobierno:
"Estamos en una situación peligrosa de polarizar las opiniones demasiado y decir que todo está bien o que todo está mal, y la gente ve todo en blanco o en negro, yo creo que hay cosas que están bien y otras que están mal. Yo celebro que haya un presidente honesto que no robe.
"Eso es una diferencia con la cleptocracia que hemos tenido
durante décadas en México, que ha habido gobiernos represores y gobiernos
ladrones, y gobernadores como Javier Duarte que son una vergüenza, y ya el solo
hecho de la honestidad me parece muy encomiable.
Tenemos que demostrar que somos útiles
Tenemos que demostrar que somos útiles
"La lucha contra el huachicol, lucha contra la corrupción,
cosas de ese tipo; pero creo que nos está quedado a deber el apoyo a la
cultura, yo creo que se necesita mucho más apoyo, y también más tolerancia con
la discrepancia. Respetar a los comunicadores, a los medios de comunicación.
“Y creo que esa parte tenemos que resistir entre todos y
también tenemos que demostrar que somos útiles, y tenemos que demostrar que
hacemos sociedad gracias a la cultura, y creo que tenemos que entregarnos a
esas tareas, y yo por eso estoy contento con esto que están organizando ustedes”.
La cultura contribuye a crear tejido social y a transmitir valores: creo que es mucho más difícil que alguien se corrompa si tiene una cultura sólida, afirmó Juan Villoro. ELIOS E. PÉREZ MÁRQUEZ. |
Ensayista, cronista sin par, el Juan Villoro apasionado del
futbol, enviado especial a los mundiales de Italia 90 y Francia 98, “domina el
arte de escribir al borde de la cancha, pero también el tono”, como dice la
contraportada del libro “Dios es redondo” (2006), que le hizo merecedor del premio internacional
Manuel Vázquez Montalbán, uno de sus innumerables galardones y reconocimientos.
Apenas este 31 de julio, el escritor fue reconocido por la
Federación de Gremios de Editores de España con el Premio Liber 2019, condecoración
otorgada cada año a un autor hispanoamericano por su capacidad para
personificar los intereses lingüísticos y culturales de las dos orillas del
Atlántico. La FGEE anunció que recibirá el galardón el 10 de octubre en un acto
que se celebrará en el Museo Lázaro Galdeano de Madrid, durante las actividades
de la Feria Liber.
Así, como un amante del rock que es, cinéfilo, llegó a
considerarse el autor más inculto de México “en un momento dado” porque apenas
había escrito un libro por gusto, y “ya quería escribir otro”. Referencia que
precede a lo largo de su narrativa con un libro del que -respondiendo a una de
las preguntas de sus lectores-, “lo he seguido recomendando a lo largo de 50
años”: De Perfil, de José Agustín (1944, Guadalajara, Jal.), que “sigue siendo
mi modelo a seguir”. Y sobra decir que en ese momento la sugerencia quedó
nuevamente revalidada. Hay que releer a José Agustín.
Yo venía en busca de cultura a Ecatepec en una época -continúa el creador de El testigo, Premio Herralde por novela. Hacía
un programa de radio para Radio Educación entre 1977 y 1981. Soy muy aficionado
a la música de rock (…) y San Cristóbal Ecatepec se convirtió en un santuario
de la contracultura y de la música rock en una época en que no encontrábamos en
otras partes de la ciudad”, como los hoyos funky.
El Centro Comunitario Ecatepec “Casa de Morelos”, cuyo
director es Vicente Camacho Lucario (dependiente del Instituto Nacional de
Antropología e Historia) y ahora coordinado con la Secretaría de Cultura
federal, tiene entre sus actividades un espacio artístico en donde la música
ocupa lugar privilegiado, por su popularidad. Parte de la jornada lo fue la
participación de grupos musicales y así lo hizo notar el también dramaturgo
Villoro cuyo segundo apellido es Ruiz.
Y los recuerdos fluyen, como haber visitado este municipio
en la década de los 70’s, luego de las prohibiciones del ‘68 en que “había
mucha prevención hacía todo lo que involucrara concentraciones juveniles”.
Los lectores
Cuestionamientos recurrentes de la audiencia como la libertad
de expresión, la censura, el tiempo que le dedica a escribir o cómo parte de un
proyecto, de lo que va a hacer, tuvieron respuesta. Y como aquí se podrá escuchar
cuando habló de su profesión, del oficio del escritor, y al mismo tiempo del
lector, anticipó que es muy malo para dar recomendaciones.
Pero -dijo-, yo creo que lo que queda, y eso es lo importante,
es que uno tiene que asociar la cultura con el afecto, porque así es como
transmitimos los valores: si alguien me quiere, si alguien me respeta y alguien
me cuenta una historia, yo esto lo voy a guardar y lo voy a atesorar para
siempre.
Entonces, es así como podemos transmitir la pasión en la
casa, y también en la escuela, y yo creo que los maestros juegan un papel
importantísimo (y lo he visto en la Normal de Maestros), con esas dinámicas de
juego, de jugar con la historia.
Eso es lo importante, que no sea una imposición, y esto me
lleva a algo que yo veía con ellos, que la lectura no se puede imponer, se
tiene que contagiar.
Y cómo se contagia si al maestro no le gusta -porque
también eso hay que decirlo porque hay maestros que no les gusta leer-, entonces
si no les gusta leer a ellos, como van a hacer que los alumnos lean, no puede
ser meramente un trámite.
Entonces cuando el maestro tiene la pasión y tiene el
afecto, no lo impone, lo contagia, y yo creo que ahí está el secreto para
formar lectores. ©
Ra.
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