OPINIÓN
Jueves 15 de febrero de 2024
En pleno Día del Amor y la amistad, nos llega esta
preocupante información sobre el racismo exacerbado del expresidente y
nuevamente precandidato por el Partido Republicano a la Casa Blanca, Donald
Trump directo y severamente agresivo con México, su país vecino, por ello se
descalifican así mismos, los aún precandidatos de la oposición que viajan a
Estados Unidos y a otras naciones para buscar el apoyo de esos personajes e
instituciones de las derechas deplorables, entre ellos al innombrable,
secretario general de la Organización de Estados Americanos, OEA, instrumento
sumiso de la potencia del norte. Eso, acéptelo o no, son posiciones
desnacionalizadas.
Avizoro que, van a criticar que tomo la información del
diario “La Jornada”, sin embrago, es de señalar que, hasta los medios
internacionales, de todas las tendencias, coinciden en el fondo, en el sentido
de que el expresidente Donald Trump llevó a un nuevo nivel su explotación del
racismo como bandera electoral al prometer que, si resulta ganador en los comicios
de noviembre próximo, “deportará a millones de migrantes cada año”.
Claro que se refiere en forma preponderante a los mexicanos;
no cabe la menor duda que es un hombre de mala memoria o de “conciencia
artificial”, puesto que el y su familia son producto de la inmigración de sus
ancestros.
Dice “La Jornada” que, “según filtraciones obtenidas por un
medio de comunicación, para lograr esta meta el magnate planea movilizar a
agentes de Inmigración y Aduanas, ICE, , junto con el Buró Federal de Investigaciones,
FBI, la Administración de Control de Drogas, DEA, todos por sus siglas en
inglés, fiscales federales, la Guardia Nacional e incluso policías estatales y
locales, para que las personas que no puedan ser deportadas de inmediato queden
recluidas en instalaciones gigantescas construidas por el ejército cerca de la
frontera con México, es decir, regresar a los horrores de “los Campos de
Concentración” de los nazis.
El nuevo plan de Trump explica el diario, “es un espejo del
muro fronterizo que prometió en su campaña presidencial de 2016 y del que
apenas pudo avanzar unos tramos durante su administración: se trata de un
proyecto tan infame como disparatado; claramente irrealizable por los desafíos
logísticos, humanos, financieros y legales a los que se enfrenta. Sin embargo,
al igual que su muralla americana, no es necesario concretarlo para ocasionar
un sufrimiento enorme a todos los extranjeros que se hallan en Estados Unidos
en situación migratoria irregular, a sus familiares que, en muchos casos, cuentan
con nacionalidad estadounidense, sus comunidades y al propio país.
El hecho es que, en estos momentos el magnate no tiene
ningún rival a la vista para hacerse de la candidatura presidencial del Partido
Republicano, y varias encuestas ya lo sitúan por encima del actual mandatario,
Joe Biden, en la carrera hacia la Casa Blanca.
Por tanto, es ineludible contemplar la posibilidad de que
logre su anhelo de regresar al poder y se ponga al frente de la superpotencia
en el periodo 2025-2029. En tanto país de partida y tránsito de migrantes, así
como por su larga frontera compartida con Estados Unidos, México está obligado
a tomar todas las previsiones necesarias y diseñar planes de control de daños
para todos los escenarios discernibles.
El Estado mexicano debe emplear sus capacidades a fondo,
pero también buscar alianzas nacionales e internacionales con todos los
organismos humanitarios dispuestos a participar en la creación o reforzamiento
de redes de apoyo a los deportados, a quienes se encuentran en camino hacia el
norte y a todas las personas que se verían afectadas de manera directa e
indirecta por los designios fascistas de Trump”.
Epìlogo: “En lo político, está claro que la cacería de
migrantes proyectada por Trump sería una violación flagrante a los derechos
humanos que alimentaría la ya alarmante oleada de agresividad que padecen y los
sometería a una clandestinidad insoportable. Es evidente que dicha situación
dañaría los vínculos bilaterales y lastimaría la relación de respeto mutuo
construida en años recientes, pero la imposibilidad práctica de romper lazos
con el mayor socio comercial del país obligaría a buscar salidas dignas y
soberanas a una coyuntura claramente indeseable”.
Agregamos, esto se multiplicaría con los demás países de
Latinoamericana y del Caribe. por ello se descalifican así mismos los aún
precandidatos de la oposición que viajan a Estados Unidos y a otras naciones
para buscar apoyos inconfesables. Este es el retrato real de TRUMP, EL RACISTA
NUMBER ONE. teodororenteriaa@gmail.com
Periodista y escritor; presidente del Colegio Nacional de Licenciados
en Periodismo, CONALIPE; secretario de Desarrollo Social de la Federación
Latinoamericana de Periodistas, FELAP; presidente fundador y vitalicio
honorario de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX,
miembro del Consejo Consultivo permanente del Club Primera Plana, Doctor
Honoris Causa por la Universidad Internacional y Académico de Número de la
Academia Nacional de Historia y Geografía, ANHG. Agradeceré sus comentarios y
críticas en teodororenteriaa@gmail.com Nos escuchamos en las frecuencias en
toda la República de Libertas Radio. Le invitamos a visitar: www.felap.info,
www.ciap-felap.org, www.fapermex.org, y www.clubprimeraplana.org, y el portal
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