OPINIÓN
Foto Vía libre. |
§
Alberto
Witvrun
Diariovialibre.com.mx, (3 septiembre, 2024).- El mantener el
registro estatal para quienes se mantuvieron leales al Partido de la Revolución
Democrática (PRD) representa la oportunidad no sólo de ser una opción electoral,
también soporte para un nuevo proyecto nacional y la oportunidad de quienes decepcionados
de lo que sucede en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) busquen espacios
y lo nutran en futuros procesos electorales para consolidarlo como partido político
local.
El abanico se abre para el PRD porque no solo puede captar
priistas arrepentidos de haberle creído a la cofradía de Carolina Viggiano
Austria, que los dejó a su suerte el 2 de junio y no les dio ni para una
botella de agua, sin nadie que pueda exigirle cuentas sobre el destino de las
prerrogativas, que acusan terminaron en la bolsa de un cada vez más reducido
grupo de serviles a la originaria de Tepehuacán de Guerrero.
También habrá quien desde el Partido del Trabajo (PT) vea en
el PRD Hidalgo una posibilidad de espacios, sobre todo aquellos que no están de
acuerdo con el manejo corporativo que ya le da el Clan Sosa Castelán y, así con
dos canicas por un lado y tres por otro, más las que le permitieron tener una
diputación local y el registro estatal habrá Sol Azteca en la entidad para buen
rato.
La dirigencia perredista si bien está ocupada en impugnar el
cambio de asignación de la curul de representación proporcional, prioriza su
reconstrucción y ya sostiene reuniones con ex candidatos a presidentes
municipales del PRI, que acusan al dirigente Marco Antonio Mendoza Bustamante
de traidor y quedarse con recursos para las campañas, para su paulatina
incorporación.
Este proceso de concretarse disminuiría aún más el voto duro
priistas que ronda en los 160 y marcaría caída total del otrora hegemónico
convirtiendo al grupo de Carolina Viggiano en los sepultureros del
Revolucionario Institucional y desdibujaría el proyecto partidista del Clan
Sosa Castelán que ya no siente lo duro sino lo tupido, por no querer que el
rector Octavio Acosta Castillo, ofreciera una disculpa pública. ©
Ra
Publicar un comentario Blogger Facebook