OPINIÓN
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| Diario Vía Libre. |
Alberto Witvrun
Diariovialibre.com.mx, (8 diciembre, 2024).- Igual que en la
canción de ronda infantil en el mundo hispanohablante cuya leyenda urbana
indica que Marín y Pingüé fueron asesinados por Teté, pero esta culpó a Cucara
Macara, está la polémica entre el morenista Cuauhtémoc Ochoa Fernández y el
secretario de Gobierno Guillermo Olivares Reyna, al revelar el presidente de la
Comisión de Hacienda y Crédito Público en el Senado de la República una campaña
en su contra orquestada por el responsable de la política interior de Hidalgo.
Ochoa Fernández que días antes sostuvo una reunión privada
con el gobernador Julio Menchaca Salazar, que sonrientes aparecieron en redes
sociales, dijo que Olivares Reyna prohíbe a los presidentes municipales, acudir
o reñirse con él, so pena de ser “castigados” obviamente cancelado apoyos y
recursos a sus municipios, lo que desmintió el aludido y calificó de
desafortunadas las declaraciones del legislador y rechazó que haya una campaña.
Tema que se ubicó rápidamente como central en los mentideros políticos, porque
no es secreto que la candidatura a la cámara alta del de Nopala de Villagrán no
cayó bien en sectores del morenismo hidalguense, sobre todo en aquellos que se
enlistaron para competir por ser la segunda fórmula, que a la menor oportunidad
tratan de descalificar a Ochoa Fernández.
Pero como en esta canción que en los niños se volvió un
juego para señalar algo o tomar una decisión indirecta, no se sabe si fue
Cuacara Macara o Teté, porque el señalamiento de Ochoa Fernández fue puntual y
directa, sin recovecos ni medias tintas, mientras Oivares Reyna los niega y
rechaza, pero debe haber algo en el fondo de crisol de la política hidalguense
para cocinar esta pugna.
Porque si el senador Cuauhtémoc Ochoa y el secretario de
Gobierno Guillermo Olivares dicen la verdad, entonces quienes mienten son la
veintena de presidentes municipales que le aseguraron al de Nopala de Villagrán
haber recibido órdenes de no acercarse y menos acudir al Senado a solicitar
alguna gestión o simplemente visitar al legislador…pégale, pégale, que ella
fue. ©
Ra
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